Ambas ciudades llevan de forma amistosa esta competitividad que ni las propias autoridades de la Generalitat de Cataluña han podido deshacer, siendo las dos ciudades consideradas co-capitales del Vallés Occidental.
Madrid-Barcelona, Sevilla-Málaga, Bilbao-San Sebastián… la competitividad entre ciudades, a veces amistosa, otras no tanto, siempre ha estado a la orden del día. Señal de que se pueda competir es que ambas disfruten de servicios, oferta de ocio y cultura e industria como para poner sobre la mesa y poder sacar pecho por cada una de ellas.
Este caso lo podemos apreciar en la comarca catalana del Vallés Occidental. Imparable motor económico y una de las zonas favoritas de los catalanes para vivir, tiene el corazón partido entre los partidarios de Sabadell como capital y los que se decantan por Terrassa como cabeza territorial.
Imagen: tripadvisor.com
Una batalla al 50%
Razones para “echarlas a pelear” no les faltan: ambas ciudades empatan en la mayoría de cuestiones decisorias sobre quién merece la capitalidad y quién no.
Respecto a población, mientras Terrassa se sitúa a la cabeza con 215.000 frente a los 207.000 de Sabadell, esta última presenta un mayor crecimiento continuo. El segundo round, el de oferta cultural vuelve a quedar en tablas al contar ambas ciudades con un importante legado modernista y con vestigios romanos y medievales.
“La igualada importancia de ambas ciudades se manifiesta en el censo: situándose Terrassa y Sabadell como cuarto y quinto municipio de Cataluña respectivamente”
Mientras que en industria Terrassa parece ponerse de nuevo a la cabeza al contar con un importante polo de empresas y con el Centro Audiovisual más importante de Cataluña, no debemos olvidar que Sabadell cuenta con el distrito financiero y con un importante banco al que da nombre, amén de contar con un pasado manufacturero histórico del que aún puede rendir cuentas.
El territorio: factor decisivo
¿Está esta pugna condenada al empate permanente? Pese a que cada punto en el que se les echa a competir a ambas ciudades parece eternizar la disputa sin claro vencedor, hay un aspecto que parece dar una futura victoria a Terrassa frente al dominio del Vallés Occidental, y no es otro que el territorio.
“Terrassa disfruta de un territorio que ocupa un total de 70,2 km cuadrados, mientras que Sabadell se queda en casi la mitad: 37,89 Km2”
La co-capital egarense disfruta de algo más que el doble de terreno que su vecina y digna cotitular de la capitalidad Sabadell. Esto le supone el poder optar a un crecimiento futuro mayor, mientras que los sabadellenses están condenados en un futuro no muy lejano a agotar sus posibilidades.
No sólo en términos de agotar el terreno ganaría esta pugna Terrassa: este aspecto le permite ser más competitiva no sólo en precios y servicios, sino que garantiza que la compra de un piso en Terrassa es optar por el futuro de una zona próspera y, de momento, inagotable.
No sólo la capitalidad en juego…
¿Significa esta apuesta ganadora de Terrassa el quitarle la capitalidad a Sabadell? Aunque esta opción aún no está sobre la mesa, el movimiento clave de los egarenses no pasa por quitarle la posibilidad de ser cabeza de comarca a Sabadell, sino directamente establecerse como comarca independiente ellos mismos.
Aunque viable y justificado, este movimiento independentista a pequeña escala no parece quererse llevar a cabo a corto plazo, ya que Terrassa está muy ligada al Vallés como para querer separarse de él. Lo que sí está claro es que se trata de una ciudad que, sea capital, sea comarca o con mayores aspiraciones, bien merece esta discusión. Razones no le faltan..