Si queremos realizar una excelente gestión, sabemos que la mejor manera es llevarla a cabo a través de una buena estrategia. De ahí nace el concepto de plan estratégico, que variará en función de las necesidades de cada cliente (empresa pequeña, mediana o grande) La consultoria estrategica se encargará de desarrollar esto.
En las últimas dos décadas, debido a un nuevo conjunto de reglas, los ejecutivos se han visto en la obligación de formarse continuamente para mantenerse al día. Gracias a la rápida adaptación de las consultorías, los servicios que aportan se ajustan fielmente a las necesidades de sus clientes. El mercado competitivo sufre cambios continuos, y será esencial fomentar centralización de las competencias para conservar el liderazgo frente a las empresas del mismo sector. Claro está que cada caso es diferente y se abordará de forma personalizada.
Una consultoría estratégica tiene el poder de definir las actuaciones que no hay que desarrollar, destacando las que sí son convenientes para el negocio. Los líderes de cada empresa, por ejemplo, deberán atender ciertas cuestiones en base a unos límites, contar con un poder decisorio bien definido, e implementar un plan estratégico que englobe a los clientes potenciales, la competencia, los servicios de la empresa y las necesidades prioritarias y secundarias.
La estrategia requiere de una lucha constante entre la disciplina y una fiel comunicación. Por eso, la asesoría estratégica servirá de guía en la toma de decisiones, todas ellas enmarcadas dentro de una serie de actividades empresariales de carácter periódico y permanente.
¿Qué es una estrategia competitiva?
Consiste en diferenciarse de la competencia.
¿A qué llamamos plan estratégico?
Este documento recoge todas las actuaciones estratégicas que deberá llevar una empresa en un plazo de uno a tres años. La metodología será uno de los factores que configuren el plan estratégico, además del estudio de la competencia, el mercado y los clientes.
¿Qué es un plan director?
Se le llama así al documento oficial que desarrollan los altos cargos de una compañía, reflejando las metas de la empresa a largo plazo. Este documento es cualitativo, objetivo y atemporal.
En definitiva, una consultoría estratégica analizará de forma precisa el posicionamiento competitivo de una empresa y definirá hacia dónde se orientarán los esfuerzos en los próximos años en todos los ámbitos de la organización en pos de un beneficio a largo plazo.
Etapas de un plan estratégico
Un plan estratégico posee una estructura, y un conjunto de etapas secuenciales:
Etapa 1.- Análisis de la situación: Nos da a conocer la realidad en la cual trabaja la empresa.
Etapa 2.- Diagnóstico de la situación: Saber las condiciones reales en las que se encuentra la empresa. Para ello es necesario comprender la actual situación tanto interna como externamente.
Etapa 3.- Objetivos estratégicos: lo que se pretende conseguir a largo plazo; son cuantificables, medibles y reales.
Etapa 4.- Estrategias corporativas: Respuestas a la necesidad que tienen las empresas para amoldarse a la situación interna y externa del mercado en el que actúan. Gracias a estas estrategias, podrán adoptar acciones rápidas y adecuadas, combinadas con las actuaciones a largo plazo.
Etapa 5.- Planes de actuación y puesta en marcha: Se incluyen los objetivos, las políticas y la secuencia de acciones principales de una organización para su puesta en marcha.
Etapa 6.- Control y seguimiento: Esta etapa nos permite tener conocimiento de cómo se van aplicando y desarrollando las estrategias y actuaciones que hemos desarrollado.
Etapa 7.- Evaluación y medición: Último proceso dentro de un plan estratégico, aplicado en una consultoría estratégica, el cual permite medir los resultados y ver el cumplimiento de los objetivos planteados..